Ética

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Ciclo 3

Libertad Y Responsabilidad

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Sat, Jul 8, 2023 10:35 AM

Al hablar sobre la libertad, estamos planteándoles reflexionar sobre una de las capacidades más maravillosas  del ser humano. El ejercicio de la libertad ha traído consigo revoluciones y transformado sociedades. Es la posibilidad que tiene el hombre de autogobernarse. En cierta forma su ejercicio dio origen a las democracias y a las constituciones. Ha empujado al hombre a las aventuras más extraordinarias  sin importar el precio que haya tenido que pagar. En la independencia de muchas de nuestras naciones, la búsqueda de libertad hizo posible la constitución de países independientes y autónomos. El filósofo Fernando Savater (1991) en su libro Ética para Amador, lo explicaba a su hijo con estas palabras: 

“Los animales (y no digamos ya los minerales o las plantas) no tienen más remedio que ser tal como son y hacer lo que están naturalmente programados para hacer… Los hombres, por el contrario, podemos inventar y elegir en parte nuestra forma de vida. Podemos optar por lo que nos parece conveniente para nosotros.”

La libertad se constituye en una capacidad inalienable que nadie puede arrebatar y una característica humana que impulsa al hombre a transformar su realidad tras la  búsqueda del bien y la felicidad. Para la ética, la libertad se nos impone como un bien indispensable en el ejercicio de la capacidad que los hombres tenemos para elegir y tomar decisiones según nos convengan o no.

 

 

A todos nos ha ocurrido haber cometido algún acto del que después nos arrepentimos, e incluso deseamos que no hubiera sucedido y que jamás algo semejante se vuelva a repetir. Situaciones así se dan cuando actuamos sin tomar en cuenta las consecuencias de lo que hacemos. 

Sin embargo, a pesar de todo, esas experiencias nos sirven porque del error también se aprende. Te invitamos a que conozcas un poco acerca de este interesante tema, de modo que aprendas a hacerles frente a tus dificultades en el momento en que estas se presenten. No olvides que tomar decisiones es ejercer nuestra libertad. Recuerda la más reciente vez que tomaste una decisión y reflexiona:

• ¿Tomaste esa decisión tú solo o intervino alguien en ella? 

• ¿Qué hiciste para decidir? 

• ¿Qué consecuencias tuvo tu decisión? 

• Para ti, ¿qué es la libertad?

Libertad, tomando  decisiones con responsabilidad

Tomar decisiones significa determinar qué queremos hacer, definir nuestras metas, escoger los pasos que vamos a seguir y solucionar los problemas que se nos puedan presentar. El ejercicio de nuestra libertad implica tomar decisiones que a veces son difíciles porque no distinguimos con claridad lo que es conveniente de lo que no lo es. Y en esta situación, podemos confundir fácilmente la libertad con el libertinaje, pues no distinguimos una cosa de la otra. Lee este caso:

“Un día salí con mi amiga Luisa al parque del barrio, pero tuvimos un desacuerdo sobre el tiempo que debíamos quedarnos allí a montar en bicicleta. Como me gritó y empujó porque no estuve de acuerdo con ella, fui hasta su casa y les conté  a sus padres lo sucedido con Luisa para que la castigaran”.

La capacidad de decidir no puede ejercerse caprichosamente, es decir, teniendo en cuenta únicamente nuestra voluntad, lo cual significa que en nuestra condición de  seres sociales nuestras decisiones deben considerar la situación y vulnerabilidad de las otras personas, lo mismo que  las normas y reglas del grupo con el que convivimos. 

Tomar una decisión implica una responsabilidad, pues debe ser adecuada, buena, conveniente a las necesidades de cada uno, y especialmente que procure el bienestar del grupo. En algunos momentos hay que tomar decisiones para definir nuestro futuro y las metas que queremos alcanzar. Por esta razón, conviene dejar a un lado los impulsos y pensar muy bien lo que vamos a hacer, analizar las diferentes opciones, calcular las consecuencias de cada una de ellas y, sobre todo, tomar una decisión propia, pues hacerles caso a otros o querer quedar bien no siempre es lo  mejor. Lee este caso:

Yo estudiaba en una institución educativa cercana a mi casa;  después de terminar mis estudios de quinto  grado,  busqué un colegio femenino porque quería estar alejada de los niños groseros y bruscos. Al cabo de algún tiempo, me invitaron a una fiesta en el barrio, sentí que hacía mucho tiempo que no compartía con niños de mi edad. 

Entonces, cuando me sacó a bailar con uno de ellos me preguntó si tenía novio. Yo me sentí muy mal y salí corriendo de la fiesta, pero luego reflexioné sobre mi actitud, hablé con mi mamá y mi hermana mayor, quienes me aconsejaron y fueron muy comprensivas conmigo. También me ayudaron a entender que no  debo vivir aislada y que solo compartiendo con los niños y niñas puedo superar mis miedos y mejorar mis relaciones. 

Solucionar un problema, como resolver una tarea difícil o comunicarse con alguien, también involucra una toma de decisiones en la que se asume el esfuerzo por conseguir ser mejores y lograr compartir una vida más agradable con las otras personas. Cuando lo hacemos de manera acertada, sentimos una gran satisfacción.

Libertad y responsabilidad 

En la edad escolar, la libertad depende del grado de confianza que dan los padres a los hijos y son ellos quienes limitan esa libertad. Pero los niños y los jóvenes deben aprender a usarla apropiadamente y a asumir responsabilidades cuando la ejercen. La libertad debe tener un propósito y estar enmarcada en un proyecto de vida que corresponda a los sueños y metas. 

La responsabilidad es el límite principal en el ejercicio de la libertad. Cuando la ejerzo debo preguntarme:

• ¿Estoy siendo responsable conmigo mismo y con mi proyecto de vida? 

• ¿Estoy siendo responsable con los demás? 

• ¿La libertad ejercida me conduce a un crecimiento personal en todas las dimensiones humanas?

La libertad también se entiende como una conquista y una preparación. Los niños no están preparados para vivir su ejercicio plenamente y por eso los padres son responsables de su ejercicio. 

A medida que crecen, los adolescentes y los jóvenes mostrarán a sus padres que son responsables y por lo tanto capaces de ejercer libertades y ser dignos de confianza. Es decir, que si somos responsables tendremos la libertad que necesitamos para la construcción de nuestro proyecto de vida. 

Los padres se preocupan frecuentemente por la libertad que dan a sus hijos. Algunos padres creen que los adolescentes piden demasiada libertad sin tener en cuenta la responsabilidad. La libertad es una conquista y a medida que los niños y jóvenes van mostrando con hechos que son responsables entonces los padres y los adultos pueden brindar mayor confianza y libertad. 

La libertad es una conquista por nuestros hechos responsables. No es algo que suceda espontáneamente, sino que es producto de un proceso gradual, es decir, de acuerdo con nuestras acciones nos hacemos dignos de ella.

Sin embargo, cuando somos irresponsables, nuestros padres tienen derecho a restringir nuestra libertad para buscarle un norte acertado a nuestra vida.  

Ser libres no significa hacer lo que queramos, sino más bien ser responsables y poder realizar lo que deseamos dentro de las normas de respeto a los demás, procurando desarrollar nuestros intereses y proyectos. 

Tareas tan sencillas como llevar buenas notas, estudiar, llegar a tiempo a casa, cumplir con nuestras obligaciones, demuestran que sabemos hacer buen uso de nuestra libertad, y en consecuencia, ese comportamiento nos lleva a gozar de privilegios, por cuanto permiten que los demás nos den confianza y nos sientan como personas valiosas y responsables en todos nuestros actos.

Entendiendo la libertad 

Ya sabemos que tenemos derecho a la libertad y que la libertad está definida como valor básico para la vida y la convivencia;  es un  derecho que tienen todas las personas a actuar sin coacción  ni restricción  de ninguna clase. Es el derecho a la libertad que encontramos en las Constitución de las naciones y que también aparece en las leyes. Si bien, este entendimiento de la libertad es correcto, resulta incompleto  e insuficiente, porque  debemos tener en cuenta que el ejercicio de la libertad se puede ejercer de un modo correcto o incorrecto. 

A este respecto, Fernando González Lucini (2002) en su obra Hablemos de la libertad nos plantea tres formas concretas de ejercer nuestro derecho a  la libertad. 

Libertad perversa  

Es cuando utilizamos la libertad de manera egoísta e insolidaria, es decir, no tenemos en cuenta a las personas que nos rodean. Podemos actuar vulnerando los derechos de los demás, causándoles daño y dolor, y cayendo en un relativismo moral de que “todo se vale” siempre que estemos satisfaciendo nuestros deseos y aquello que queremos hacer.

Libertad manipulada  

Sucede cuando nos dejamos influir por los amigos, las modas, las costumbres o cualquier exigencia  externa que nos impone determinadas formas de actuar. En esta clase de mal llamada libertad, nos dejamos gobernar por otros. No actuamos con soberanía sino sujetos a la voluntad ajena. Así sucede, por ejemplo, cuando un grupo de amigos nos invita a cometer actos de indisciplina o hacer sentir mal a un compañero, aunque nuestro criterio moral nos indique que no debemos hacerlo; sin embargo, nos dejamos llevar por el grupo. 

Libertad responsable  

Sucede cuando actuamos de forma crítica, consciente y autónoma. En este caso, tenemos suficiente conciencia de los actos que acometemos y sabemos las consecuencias que se derivan  de ellos, de modo que asumimos la responsabilidad de nuestras propias acciones, respetando los derechos y las libertades de los demás. 

 

Actividad

ENSAYO

1. Escribe un ensayo breve en el que explores las siguientes preguntas:
   a. ¿Qué significa ser libre para ti?
   b. ¿Cuáles son las principales dimensiones de la libertad? (Ejemplo: libertad personal, libertad política, libertad de pensamiento, etc.)
   c. ¿Cuál es la relación entre la libertad y la responsabilidad? ¿Crees que la libertad conlleva una mayor responsabilidad?
   d. ¿Qué obstáculos o limitaciones pueden surgir en la búsqueda de la libertad individual?
   e. ¿Cómo influye la libertad en la toma de decisiones éticas? ¿Cuál es el papel de la responsabilidad en este proceso?

2. Utiliza ejemplos concretos para ilustrar tus ideas y argumentos. Puedes mencionar situaciones de la vida cotidiana, eventos históricos o casos éticos relevantes.

3. Extensión del ensayo: Aproximadamente 500-800 palabras.

Recuerda que esta actividad se trata de tu propia reflexión y opinión. No hay respuestas correctas o incorrectas, pero se valora la claridad de tus ideas, la coherencia de tus argumentos y la capacidad de vincular tus reflexiones con los conceptos éticos aprendidos a traves de la plataforma.