Biología (nivel 1)

Biología (nivel 1)

Ciclo 4

Educación Sexual

En esta clase trabajaremos conceptos básicos de la educación sexual, métodos anticonceptivos, infecciones de transmisión sexual, embarazo en adolescentes y sobre todo el amor propio.

Fri, May 22, 2020 8:55 PM

EDUCACION SEXUAL

¿Qué es la sexualidad en la adolescencia?

La sexualidad en la adolescencia es aquella en la que el joven se desarrolla física y mentalmente, adquiriendo los caracteres sexuales secundarios (los que no tienen que ver con el órgano reproductor, como la nuez en los hombres o el ensanchamiento de las caderas en las mujeres) y desarrollando el pensamiento maduro; pero también despierta un comportamiento sexual, se transforma en un ser sexual.

La sexualidad no sólo tiene que ver con el acto de reproducirse, sino que representa la generación de deseos, sentimientos, fantasías y emociones, es decir, el desarrollo de una identidad sexual, que se puede definir como aquella parte de la identidad del individuo que le permite reconocerse y actuar como un ser sexual.

Etapas del desarrollo de la sexualidad

Al igual que el desarrollo físico y mental, la sexualidad se forma gradualmente y necesita pasar por una serie de etapas antes de completarse. Los cambios que se producen en la sexualidad pueden enmarcarse dentro de las etapas de la adolescencia y la pubertad, ya que las transformaciones físicas y mentales condicionan sobremanera el desarrollo de la sexualidad y de la identidad sexual:

 

 

  • Adolescencia temprana (11-13 años): Durante esta etapa, que se caracteriza por la velocidad de los cambios físicos en el adolescente, el joven se encuentra aún lejos del deseo sexual adulto, por lo que se presenta como una fase de autoexploración (a menudo a través de la masturbación), debido a los nuevos cambios físicos y psíquicos que experimenta (como la aparición de los primeros impulsos sexuales y de la espermarquia o primera eyaculación), y también de exploración del contacto con el otro sexo
  • Adolescencia media (14-17 años): El adolescente ya está casi completamente desarrollado, sus órganos sexuales están listos para la reproducción y el deseo sexual se incrementa. En esta fase se desarrolla una sensación de invulnerabilidad y fortaleza que inducen al joven a comportarse de una forma narcisista. Se empieza a buscar el contacto habitual con el otro sexo y pueden llegar las primeras relaciones sexuales. El adolescente no sólo responde a sus impulsos sexuales, sino también a su narcisismo, es decir, pone a prueba la propia capacidad de atraer al otro. También se considera que durante esta etapa se produce el auge de las fantasías románticas. Las relaciones sociales fuera del entorno familiar, especialmente con amigos, empiezan a tener preponderancia, por lo que el adolescente contrapone los valores y la educación sexual recibida de sus padres con la de sus amigos (en muchas ocasiones llenas de mitos derivados de la poca o nula experiencia sexual), lo que puede acarrear riesgos, si a esto se suma que el adolescente aún no ha desarrollado del todo el pensamiento abstracto y en algunas ocasiones le cuesta pensar en las consecuencias de sus actos. Además, al no haber desarrollado por completo el pensamiento adulto, el adolescente utiliza los sentidos para expresar sus emociones
  • Adolescencia tardía (17-21 años): El adolescente se ha desarrollado por completo, física y psíquicamente. La capacidad de pensar en abstracto y de ser consciente de las consecuencias futuras de los actos hace que el joven pueda mantener relaciones sexuales maduras y seguras. El deseo ya no sólo responde a un estímulo o pulsión sexual, sino que el adolescente, ya adulto, comienza a buscar otros valores en sus relaciones sociales, como la confianza o la reciprocidad

 

La importancia de recibir una buena educación sexual

 

  • La sexualidad entra dentro de la intimidad: Las relaciones sexuales pertenecen a la intimidad de las personas, por lo que no es necesario compartir los detalles sobre las mismas, a no ser que se quiera hacer. Los padres y el entorno no deben presionar al adolescente.
  • Desarrollo de habilidades sociales y de autocontrol: Los impulsos sexuales dominan a los racionales durante la adolescencia, sobre todo al comienzo de la fase de adolescencia media, donde el joven ya ha desarrollado por completo sus órganos sexuales, pero no el pensamiento adulto. La educación debe proveer al adolescente de conocimientos que le permitan desarrollar conductas y comportamientos sexuales correctos
  • Informar: Es vital dotar al adolescente de la información necesaria sobre los riesgos que traen las relaciones sexuales sin protección (embarazo precoz, Enfermedades de Transmisión Sexual, etcétera), así como de los beneficios que reporta practicar sexo seguro.

 

Las infecciones de transmisión sexual (ITS) no sólo causan afectaciones inmediatas y localizadas a las áreas de los genitales, también pueden generar compromisos serios y a largo plazo en tu salud cuando no se atienden a tiempo. Aquí encuentras más información sobre las ocho ITS más comunes y sus principales manifestaciones.

 

  1. Sífilis: Esta infección bacteriana puede manifestarse en tres fases. La sífilis primaria se circunscribe al lugar donde ocurrió el contagio, sea el aparato genital, el ano o la boca, y causa una úlcera indolora denominada chancro, que puede pasar inadvertida y desaparecer en unas cuantas semanas, aunque no se reciba tratamiento, pero no desaparece la infección.

    Si no se trata a tiempo da paso a una sífilis secundaria que implica una diseminación de la bacteria hacia el cuerpo. Comienzan erupciones en la piel, inflamación de las glándulas linfáticas, fiebre y dolor de garganta.

    La sífilis incluso puede llegar a una tercera etapa después de permanecer latente en el organismo por varios años sin síntomas cuando no se ha recibido tratamiento. generar enfermedades más complejas como una neurosífilis, que es la infección a nivel del cerebro o una infección de la aorta denominada aortitis por sífilis.

  2. Gonorrea: Es una de las ITS más comunes en la población joven, entre los 20 y 30 años. Puede ser asintomática en las mujeres o presentarse de manera leve, llegando a pasar desapercibida para quienes la portan, lo cual eleva el riesgo de contagio para otras personas.

    Los síntomas más comunes en las mujeres incluyen flujo vaginal amarillento y de mal olor, sangrados entre periodos menstruales y dolor o ardor cuando orina. Mientras que los hombres tienen manifestaciones más pronunciadas como dolor o escozor cuando orinan y secreción blanca, amarilla o verdosa del pene.

    La gonorrea progresa a lesiones más severas y permanentes para la mujer si no se trata oportunamente. Se puede causar la Enfermedad Inflamatoria Pélvica con procesos inflamatorios crónicos de sus genitales internos, el útero y las trompas, de forma que se altera la anatomía de su aparato genital y las estructuras que ayudan a que se consolide un embarazo.

  3. Clamidia: Es una infección silenciosa, pero los síntomas, aunque parecidos a los de la gonorrea tienen diferencias. Básicamente, las secreciones vaginales y del pene que produce la clamidia son más ligeras y blanquecinas, contrario a las de la gonorrea. Igualmente, de no tratarse puede producir lesiones en el aparato reproductor femenino.
  4. Tricomoniasis: Es causada por un parásito y es más frecuente en mujeres, aunque también se presenta en los hombres. Se requiere un contacto físico de las áreas genitales para su contagio.
    Principalmente se manifiesta mediante una vaginitis con flujo vaginal fétido, inflamación e irritación de la zona vaginal y dolor durante las relaciones sexuales.

    Cuando la infección ocurre durante el embarazo, hay mayor riesgo de que el bebé nazca prematuro y con bajo peso. Incluso, tienen altas probabilidades de nacer muertos o de morir al nacer en comparación con los bebés de madres no infectadas.

  5. Herpes genital: La infección es causada por el virus del herpes simple que no se puede curar, pero que en la mayoría de los casos no presenta síntomas o son mínimos. Sus manifestaciones consisten en ampollas en la zona de los genitales, el ano o la boca.
    Por su carácter biológico puede presentar recurrencias, vuelven a generar el cuadro clínico de manera cíclica y bajo ciertas circunstancias, pero eso está sujeto a la situación inmunológica de la persona.
  6. Hepatitis B: Es de origen viral y no produce afectación a nivel de los genitales, pero se traduce en una infección crónica del hígado, que puede llevar a la cirrosis hepática y el cáncer de hígado.
  7. VIH: Este virus ataca el sistema inmunitario de la persona, dejando a su organismo vulnerable a infecciones y enfermedades y disminuido para combatirlas. Cuando se encuentra en una etapa avanzada, el virus progresa a SIDA (Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida) y la inmunosupresión es tal que puede causar la muerte.

    La llegada del SIDA se puede retrasar si la persona asume el tratamiento con antirretrovirales desde que recibe el diagnóstico, de forma que disminuye los efectos del virus en su organismo.

  8. VPH: El Virus del Papiloma Humano (VPH) produce manifestaciones locales. Por ejemplo, puede generar verrugas virales, a nivel genital, que tienen un impacto estético y eso afecta llevar una sexualidad plena. Pueden progresar a lesiones más grandes que se conocen como condilomas y así generar incomodidad con la higiene personal tanto en hombres como en mujeres. Este virus se relaciona con el desarrollo de cáncer de cuello uterino en las mujeres y cáncer de la región anal en los hombres.

 

Fuentes

 

Actividad
  1. Lee atentamente el texto y escribe tu opinión sobre el tema
  2. Describe brevemente la importancia del uso de los anticonceptivos
  3. Que es identidad sexual y que es genero
  4. A tu manera de ver porque crees que el embarazo en adolescentes es una problemática social. (realiza un breve escrito)