Ética

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Ciclo 3

Mis Emociones Y Sentimientos

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Sat, Jul 8, 2023 10:26 AM

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Carlos y Helena estuvieron este fin de semana en un paseo en el río. Carlos está feliz porque ese día aprendió a nadar. En cambio, Helena está triste porque su perrita se ahogó en el río. Su papá la ha consolado y le ha dicho que es normal que se sienta triste porque así nos sentimos todos cuando perdemos nuestros objetos personales, mascotas o seres queridos. Su profesor también le ha dicho que en estos momentos debemos recordar las cosas buenas, superar la situación y seguir adelante. Por esto, el profesor ha preparado una clase con el curso de Carlos sobre los sentimientos y las emociones. Todos tenemos sentimientos que no son ni buenos ni malos. Solo son sentimientos. Debemos aprender a manejarlos, es decir, aceptarlos, aprender de ellos y superar las molestias que nos producen los sentimientos no deseables. Lo primero que aprenderás en este capítulo es a identificar tus sentimientos, qué cosas, personas y situaciones te afectan, qué haces cuando te sientes así y lo más importante: aprender asumir una actitud positiva cuando experimentas diversos sentimientos.

Dinámica emocional

 

 

¿Qué son las emociones y los sentimientos? 

Las emociones y los sentimientos son expresiones de nuestra dimensión afectiva que nos permiten mostrar a los demás y a nosotros mismos, cómo todo cuanto nos rodea puede afectarnos. La emoción es espontánea, aparece ante una situación de forma repentina. Ante una noticia o la llegada de una persona podemos ponernos, tristes, ansiosos o alegres. La emoción es formada por aprendizajes culturales y la incorporación de vivencias personales. 

Los sentimientos son el resultado de la relación entre las vivencias y experiencias que hemos tenido y van constituyendo nuestra forma de ser. Alegres, tristes, sociables o aislados. Los sentimientos son más duraderos, estables y tienen menor intensidad que las emociones. 

Cualquier situación externa o interna trae consigo una reacción de rabia, alegría o tristeza, que desencadena una decisión emocional frente a mi sentimiento, donde valoro, odio, comprendo o soy indiferente. Esta decisión me conduce a actuar positiva o negativamente, y en esta dirección, dicha experiencia me programa de un modo semejante frente a futuras emociones. Por eso, es necesaria la reflexión antes de la acción Es así como aprendo a manejar mis sentimientos y actuar asertivamente en todas las circunstancias. 

Dinámica de los sentimientos y emociones 

No somos dueños de nuestros sentimientos y emociones, pero sí tenemos el deber de procurar situaciones y pensamientos que nos ayuden a vivir una vida afectiva sana. A todos nos puede pasar que alguien cercano a nuestros afectos se muera y por eso nos podemos sentir tristes. En este caso, la vivencia del duelo es un proceso necesario. Por eso, debemos reconocer los buenos momentos que tuvimos con esa persona y aceptar que ya no está con nosotros, de tal manera que podamos cultivar pensamientos que nos ayuden a retomar nuestras actividades diarias. ¿Has perdido algún ser querido? ¿Cómo te sentiste? ¿Qué cosas, personas o situaciones te ayudaron a recuperarte? 

Los sentimientos y las emociones de las personas varían de acuerdo con la formación de la persona y la forma como perciben la realidad y las actitudes aprendidas. Es decir, aunque es natural que experimentemos emociones y sentimientos es importante aprender a manejarlos; si nos dejáramos llevar por lo que instintivamente sentimos y quisiéramos hacer, seguramente que podríamos llegar a herir o maltratar a alguna persona. A continuación encontrarás unos elementos básicos para aprender a manejar los sentimientos.

 

Manejo de los sentimientos 

No puedes evitar tener sentimientos y emociones sean ellos agradables o desagradables, pero la forma como los asumes hace la diferencia para que crezcas como persona. A continuación encontrarás una serie de pautas que te ayudarán a entender cómo asumir los sentimientos y las emociones y hacerlos provechosos para tu crecimiento personal.

 

1. Me reconozco como ser humano
Reconozco que soy humano. Esta condición hace que me sienta de formas diferentes en diversas circunstancias. Soy un ser sensible con emociones y sentimientos frente al mundo.

 

 

2. Reconozco lo que es ser humano
Eso significa aceptar nuestra complejidad, pues somos razón, emoción, tenemos capacidad de crear lenguaje, de hacer símbolos, dar sentido, aceptar nuestra naturaleza social, comprender que nos construimos en relación con los demás, de modo que interpretamos nuestro entorno, transformamos nuestra vida.

 

 

 

 

3. Me reconozco en la diferencia. El otro hace que me vea igual y diferente
Reconozco que los otros también tienen necesidades e intereses, que somos iguales porque sentimos y soñamos. Sentimos como los otros. No somos superiores ni inferiores, tenemos la misma dignidad de seres humanos.

 

 

 

 

4. Expreso mis sentimientos
Las emociones no son ni buenas ni malas, somos los seres humanos los que las convertimos en acciones positivas o negativas. No es malo que me enoje, sino la reacción que asumo como consecuencia de mi enojo, que se puede convertir en una acción muy creativa o muy destructiva.

 

 

 

 

5. Me conozco en los sentimientos. Lo que me gusta, lo que no me gusta
Los sentimientos y emociones me ayudan a conocerme a mí mismo y me permiten identificar mis gustos e intereses. Gracias a ellos, las personas saben cómo son. Cuanto más conozcamos los sentimientos mejor conocemos nuestras reacciones y actitudes y podemos anticipar nuestras respuestas positivas frente a lo que nos suceda.

 

 

 

 

6. No temer equivocarme
Debemos aceptar que somos una obra en proceso de construcción. Cada día tenemos la oportunidad de hacer lo mejor por nosotros mismos. Dice John Powell: “Ojalá  me pudiera poner un letrero que dijera: no me lastime; perdóneme, es que no estoy terminado de hacer”.

 

 

 

 

7. Ser responsable de mis actos
Es ser consciente de que todo cuanto haga, son actos por los que debo responder con seriedad.

 

 

 

 

8. Buscarles solución a todas las situaciones
Cuando atravesamos un momento difícil, a veces no sabemos cómo hallar la solución, pero si sabemos hacerle frente a ese momento, podemos superarlo con éxito. La vida nos enseña que las situaciones se van solucionando. Hay que cultivar la esperanza y la fe en el mañana.

 

 

 

 

9. No reaccionar con ira o violencia
Si ante cualquier problema reaccionamos con ira o violencia, nada se podrá resolver. Por el contrario, el problema se agudizará y deteriorará nuestras relaciones con los demás.

 

 

 

 

10. Darles tiempo a tus sentimiento
Es necesario buscar formas alternativas de calmarse y solucionar los problemas. Una opción consiste en respirar con tranquilidad. Tomar aire. Alejarse de la situación. Distanciarse del problema y reflexionar es el camino correcto para empezar a solucionarlo.

 

 

 

 

11. Volver a mirarse antes de acusar a otros
En ocasiones pensamos que son los demás los responsables de nuestro malestar, cuando en realidad somos nosotros mismos.

 

 

 

 

12. Trascender en el sentimiento,  no quedarse en él 
Piensa positivamente sin lamentarte por lo sucedido. Piensa en las oportunidades y olvida el pasado. Las experiencias del pasado dejan muchas enseñanzas, pero es necesario superarlas y hacerles frente a los nuevos desafíos.

 

 


¿Cómo expresar mis emociones?

 

 

Existen diferentes formas de reaccionar frente a las emociones. Debemos aprender a manejar los sentimientos adecuadamente. Todos estos ejercicios te permitirán tener alternativas frente a cualquier sentimiento que te ponga mal. Si los practicas estarás en condiciones de ser más asertivo en relación con los sentimientos que puedas tener en cualquier momento. Recuerda, los sentimientos no son buenos ni malos. Son inherentes a la naturaleza humana. Lo que sí puedes hacer es actuar asertivamente frente a ellos, para no hacerte daño ni hacerles daño a los demás.

Actividad

TALLER

Instrucciones:

1. Toma un tiempo para reflexionar sobre tus propias emociones y sentimientos. Puedes elegir un momento tranquilo y relajado en tu casa para llevar a cabo esta actividad.

2. Prepara un diario o cuaderno donde puedas registrar tus reflexiones y respuestas a las preguntas que se te presentarán a continuación.

3. Durante una semana, lleva a cabo las siguientes actividades:

   a. Observa tus emociones: En diferentes momentos del día, detente y observa cómo te sientes emocionalmente. Identifica las emociones que estás experimentando en ese momento (alegría, tristeza, enojo, miedo, etc.) y anótalas en tu diario.

   b. Identifica las causas: Para cada emoción que registres, trata de identificar la causa o el evento desencadenante. ¿Qué fue lo que provocó esa emoción en ti? Anota tus reflexiones en tu diario.

   c. Analiza tus reacciones: Una vez que hayas identificado las emociones y sus causas, reflexiona sobre cómo has reaccionado ante ellas. ¿Has expresado tus emociones de manera saludable y constructiva, o has tenido dificultades para gestionarlas? Escribe sobre tus reacciones y cualquier desafío que hayas enfrentado al lidiar con tus emociones.

   d. Busca estrategias de gestión emocional: Investiga y encuentra al menos tres estrategias efectivas para gestionar tus emociones y sentimientos de manera saludable. Pueden incluir técnicas de relajación, respiración consciente, hablar con alguien de confianza, escribir en un diario, realizar actividades creativas, entre otros. Describe estas estrategias en tu diario y reflexiona sobre cómo podrías aplicarlas en tu vida cotidiana.

4. Síntesis y conclusión: Al finalizar la semana, realiza una síntesis de tus reflexiones en tu diario. Responde las siguientes preguntas:

   a. ¿Qué patrones o tendencias has identificado en tus emociones y sentimientos?

   b. ¿Qué has aprendido sobre ti mismo/a y tu forma de gestionar tus emociones?

   c. ¿Qué estrategias de gestión emocional te parecen más efectivas y cómo podrías implementarlas en tu vida diaria?